Continúa el polémico caso de Trump y sus llamados a la insurrección, esta vez, los demócratas abrirán un nuevo proceso de ‘impeachment’, que podrá tener lugar este próximo miércoles 13 de enero, en la que la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, van a votar por la opción de destituir al republicano o no.
Todas estas acusaciones, provienen de los actos violentos que se registraron la semana pasada en El Capitolio, en el que varias personas murieron y otras tantas resultaron heridas.
Por ello, el Partido Demócrata ya presentó de manera formal la solicitud de ‘impeachment’ contra el presidente Trump, señalando el artículo sobre “incitación a la insurrección”, que dejó como resultado, el asalto a El Capitolio el día 6 de enero de este año.
Hasta los momentos se conoce, que según los plazos, no se puede destituir al presidente hasta el 20 de enero, pues, en esa fecha, tomará el poder el nuevo presidente de E.E.U.U. Joe Biden. Pero, a pesar de esto, si se lleva a cabo el ‘impeachment’, el republicano puede quedar inhabilitado, lo que quiere decir, que no podría ejercer ningún cargo político y mucho menos postularse como candidato presidencial para el año 2024.
Ya van dos
Esta es la segunda vez que Donald Trump se enfrentará a un juicio político, pero, esta vez, ha sido acusado por incitar a la insurrección y la violencia, según indican los demócratas. Esa resolución, se encuentra respaldada por 210 patrocinadores.
Con solo 218 votos se puede realizar un juicio político contra Trump, donde será acusado por los cargos ya mencionados.
Así funciona el ‘impeachment’
Según la Constitución de los Estados Unidos, se puede juzgar a un presidente, iniciando su desarrollo en la Cámara de los representantes. Se puede llevar a cabo en la primera fase en la Comisión de Justicia para luego pasar al pleno.
Con solo una mayoría simple se puede dar inicio, por lo tanto, los demócratas ya podrían dar por hecho este proceso de juicio político, que solamente se ha podido realizar tres veces en toda la historia de los Estados Unidos.
El primero de ellos fue con el caso de Andrew Johnson, en el año 1868, seguido de Bill Clinton, en 1998 y luego el mismo Donald Trump, en 2019. Hacia 1974, Richard Nixon también estuvo a punto de estar enjuiciado, pero se salvó de ello.