Este pasado martes, el cardenal italiano Angelo Becciu, se defendió de la acusación en su contra sobre una supuesta corrupción financiera en el Vaticano, durante la primera visita a su juicio. Junto al cardenal, otras nueve personas también han sido acusadas por ciertas irregularidades dentro de la Secretaría de Estado del Vaticano.
La acusación que recae sobre todas estas personas, son de malversación, blanqueo, fraude y abuso de poder, durante una inversión irregular de al menos 350 millones de euros, que se destinaron para la adquisición de un edificio ubicado en Londres, así como también otras operaciones irregulares.
Por su parte, el principal acusado, Becciu, sigue en la espera muy paciente de que comience el proceso y la aportación de “las numerosas pruebas y testimonios que demostrarán su inocencia de toda acusación».
Así lo ha señalado, Fabio Viglione, quien es el abogado defensor del cardenal, durante la primera audiencia que se ha celebrado de su juicio. Se espera que este continúe para el día 5 de octubre.
Los delitos que se le imputan al cardenal italiano son por soborno, abuso de oficio y malversación, según lo pudo anunciar la Santa Sede.
Falsas filtraciones
Angelo Becciu, viene siendo el primer cardenal al que se le ha acusado de manera formal ante el Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, por supuestos delitos de corrupción financiera.
La demanda por filtración de información a monseñor Alberto Perlasca y a las relaciones públicas Francesca Immacolata Chaouqui, quien también fue condenada en el juicio Vatileaks2. A Francesca se le acusa por «las gravísimas y completamente falsas declaraciones» que aportó a los fiscales vaticanos durante las pesquisas que realizaban.
Entre las investigaciones que hasta los momentos están llevando a cabo las autoridades competentes de este juicio, está la compraventa de un inmueble en un lujoso barrio de la ciudad de Londres.
Del mismo modo, sobre la gestión de los fondos del Óbolo de San Pedro, la institución que invierte en obras de caridad, las donaciones económicas de los fieles.
Cargos de corrupción en el Vaticano
Gian Piero Milano, quien es el Promotor de Justicia, inició en el año 2019, una investigación, detectando en el informe que realizó que, había «graves indicios de corrupción» por algunas inversiones inmobiliarias. De hecho, para ese momento, el responsable de esos movimientos de compra de propiedades, era el mismo cardenal Becciu, quien estaba como sustituto para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado.
Pero, en 2018, había dejado ese cargo, pues, fue designado como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos por el papa Francisco. El pasado año 202, el pontífice defenestró al Becciu quien presentó su renuncia como Prefecto y, por ende, pierde sus derechos como cardenal. Actualmente, todavía está conservando el título y vive en el Vaticano.
