El mes de diciembre inicia sangriento en Estados Unidos, con el asesinato de cuatro jóvenes y ocho heridos. El violento hecho ocurrió en el centro educativo Oxford High School situado en el estado de Míchigan, cuando un joven de 15 años entró este martes al recinto formando un tiroteo con un arma semiautomática.
Los menores que lamentablemente fallecieron en el tiroteo, fueron dos chicas y un chico, tenían 14, 16 y 17 años. Sumado a ellos, hay ocho heridos, siendo siete alumnos y un profesor, quienes sufrieron varios impactos de bala. Cada uno de ellos, ya fueron trasladados a un centro hospitalario para ser atendidos por el personal médico, aunque dos de ellos se encuentran en estado crítico.
Entre los más graves, hay una joven de 14 años que se encuentra conectada a una máquina de respiración artificial, luego de que sufriera fuertes lesiones en la mandíbula y la cabeza.
Por su parte, la gobernadora del estado de Míchigan, Gretchen Whitmer, dio su opinión en público después de lo ocurrido y denunció que esta es una problemática que Estados Unidos está sufriendo hoy en día.
Arrestado el menor responsable del tiroteo
El ayudante del sheriff del condado de Oakland, Mike McCabe, se desplazó rápidamente hasta el instituto, donde anunció sobre los hechos ocurridos, mediante una rueda de prensa ante los medios de comunicación. En la comparecencia explicó que, el tiroteo duró pocos minutos y que, los agentes llegaron muy rápido a la escuela sin demorar.
Contó que, el estudiante, llegó con el arma dentro de su mochila, se dirigió al baño y luego salió con el arma en la mano disparando a diestra y siniestra, acto que quedó grabado por las cámaras de seguridad del colegio.
La oficina del alguacil del condado aportó la información de que, el servicio de emergencias recibió aproximadamente más de 100 llamadas alertando de la posibilidad de que hubiera un tirador en ese instituto.
Afortunadamente, el tirador fue arrestado por la policía en menos de 5 minutos, desde el mismo momento en que se realizó la primera llamada de emergencia. Los agentes policiales lograron aprehender al sospecho sin problemas, luego de haberse producido la ráfaga de 15 y 20 disparos en las víctimas, con una pistola que tenía más de un cargador de municiones.
El menor no opuso resistencia alguna y se respaldó en el derecho de guardar silencio. De hecho, el ayudante del sheriff contó que, «Cuando venían por el pasillo, lo vieron. Levantó las manos, tomaron un arma y lo detuvieron».
