Se conoció recientemente que las autoridades, anunciaron el confinamiento de casi 3.500 personas que residen en la zona más cercana al polígono industrial del Callejón de la Gata, en Los Llanos de Aridane. La decisión ocurrió, luego de que, entrara en combustión con una fábrica de cementos cuando hizo contacto con la lava del volcán en La Palma, proceso que dio lugar a la liberación de gases.
Miguel Ángel Morcuende, director técnico del Plan Especial de Protección frente a Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca), ofreció una rueda de prensa en la que informó que la decisión la tomaron en tanto se encuentran analizando estos gases. También dijo que, hasta ahora, son entre 2.500 y 3.500 personas que han resultado afectadas por el confinamiento.
Esa área confinada, está delimitada por el espacio que comprende entre el cruce del camino de la Cruz Chica con la carretera LP-2, el cruce con Nicolás Brito Pais y la circunvalación hasta la rotonda. Toda esta zona, ha sido afectada por el incendio forestal que se produjo desde el pasado mes de agosto y que abarcó hasta el campo de fútbol de El Paso.
La toma de decisiones
Por otro lado, el Pevolca, terminará de determinar este martes si van a continuar o no con el confinamiento según sean los análisis de la calidad del aire. Así lo dejó claro el director técnico de esta entidad aseguró que, lo más razonable es que se continúe en las casa con el fin de evitar que se generen peores problemas de salud a consecuencia de los gases.
Son aproximadamente unas 6.000 personas que fueron evacuadas de sus casas desde que se inició la erupción, el pasado 19 de septiembre. Hasta el momento, las autoridades continúan con la suspensión de la actividad lectiva en Los Llanos, El Paso y Tazacorte hasta tanto haya una vuelta segura.
Del mismo modo, informaron que están suspendidas las clases, dejando a unos 4.073 alumnos inactivos en sus estudios.
Cuatro semanas de erupción
Ya van cuatro semanas desde que surgió el volcán en La Palma, destruyendo unas 591,1 hectáreas -65,33 hectáreas más que el domingo. Según Pevolca, la anchura máxima del flujo es de 1.520 metros.
Por su parte, los técnicos se encuentran vigilantes a la nueva colada de lava que se acerca al mar por el norte. Ahora mismo, está avanzando sobre la faja que creó la erupción del San Juan en 1949 y está a escasos 300 metros del océano.