Este lunes, el Eurogrupo decidió aprobar el acuerdo del MEDE y, además, adelantó a dos años la red de seguridad del fondo de resolución bancaria, como parte de una medida para cualquier otra crisis que se avecine en el futuro. Estas medidas habían sido pactadas en diciembre del pasado año 2019, pero hubo ciertos desacuerdos que impidieron que se implementara en su momento, en combinación con la llegada de la pandemia.
Olaf Scholz, ministro de Finanzas de Alemania, señaló durante una reunión telemática que, esta reforma MEDE se encargará de reforzar el euro y al sector bancario europeo, pues, se está construyendo una eurozona que resultará mucho más fuerte para hacer frente a los diferentes ataques especuladores.
También se adelantó la red de seguridad para el fondo de resolución bancaria a dos años, con el único fin de que los bancos europeos sean más resilientes y para dar apoyo a la economía.
El tratado de MEDE podrá entrar en vigor para el próximo año 2021, cuando sea firmado y ratificado por el grupo de países miembros, que permitirá tener activa la red de seguridad a la junta de gobernadores del fondo para el primer trimestre del año 2022.
Ayuda, poder y vigilancia
Esta reforma, ha sido especialmente creada con la finalidad de dar una ayuda a aquellos países que se pueden encontrar en apuros y que también pretende otorgar más poder para los futuros rescates y vigilancias de estos países.
Las cláusulas de acción colectiva están estrechamente ligadas con las cláusulas de agregación simple (CAC) para emitir bonos a partir del año 2022, tema que causó la controversia en Italia, pues, una parte de los partidos, aseguraban que esta medida aumentaría los costes de la deuda del país, y por eso Roma rechazó la reforma el año pasado.
Fue entonces como este lunes, el Eurogrupo confirmó la noticia de que aprobaría la reforma del MEDE, pues, la consideran como fundamental para los países que la necesiten.
Señala Paschal Donohe, presidente del Eurogrupo que «El hecho de que a este beneficio ahora mismo no se le esté dando la utilidad que se debe, no es más que un reflejo del éxito de nuestros esfuerzos para lidiar con el virus que nos afecta desde el punto de vista de la financiación».
