En España, para poder hacer un contrato de luz, primero se debe estar conectado a la red que distribuye energía eléctrica en la zona en donde se reside, por lo que será indispensable dar de alta a este servicio de electricidad, mientras un técnico realiza el proceso de instalación del contador de luz.

¿Qué se necesita para contratar la luz?

Primero que nada, el requisito principal y más importante para poder realizar un contrato de electricidad, bien sea por teléfono, internet o por alguna oficina comercial, es contar un acceso a una red eléctrica en la zona donde se vive.

Para realizar este procedimiento, el cliente debe dar de alta el suministro de energía eléctrica del inmueble, proceso que será gestionado por la distribuidora eléctrica correspondiente de esa zona. Es importante recalcar que, tanto el alta de la luz como el contrato del servicio eléctrico, son procesos simultáneos. Pese a esto, para que pueda realizarse en contrato de la luz hay que ponerse en contacto primero con la comercializadora y no con la distribuidora, como muchas personas piensan.

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¿Qué diferencia hay entre una comercializadora y una distribuidora?

Una vez que España consiguió la liberación del mercado eléctrico, se pudo determinar con más claridad lo que diferencia a cada uno de estos servicios. Para empezar, la distribuidora se encarga de administrar la red eléctrica y de ofrecer el acceso a esa red que se asigna por zona geográfica el Gobierno.

Por otro lado, la comercializadora, tiene como función facturar a los clientes por el servicio de suministro de electricidad y estos son de libre elección.

Pasos para contratar el servicio eléctrico

Como ya lo dijimos antes, hay que estar conectado a una red en la zona donde se habita, bien sea que el contrato se hará por primera vez o por segunda. Para que puedas realizar este proceso debes tener en cuenta estos pasos:

  1. Elige tu tarifa de luz: resulta importante este paso para puedas tener un mejor control del dinero que pagarás, adaptado a tu presupuesto, para ello, es recomendable que uses un comparador de ofertas online gratuito.
  2. Contacta a una comercializadora: una vez que tengas en menta la tarifa ponte en contacto con la comercializadora, que bien puede ser vía telefónica para que des de alta tu servicio, puedes hacer el contrato en su portal web o, si lo prefieres, puedes acudir a la oficina.
  3. Te pedirán documentación: a comercializadora te solicitará algunos papeles dependiendo de la situación, por ejemplo, si ya contabas con un servicio eléctrico de otra empresa, no te asignarán cambios en el coste de tu tarifa. Pero, si es la primera vez que lo contratas o el servicio está de baja, tendrás que hacer abonos de los costes por los derechos del alta de la electricidad.
  4. Si es una alta nueva: una alta tras una baja o bien un suministro con antigüedad, la comercializadora te enviará a una distribuidora asignada en la zona donde está el inmueble con el fin de realizar las operaciones necesarias.
  5. Aportar documentación a la comercializadora: luego de haber recibido la visita del técnico, debes consignar ante la comercializadora el Boletín Eléctrico y el número CUPS.
  6. Listo el servicio: dispondrás del servicio eléctrico en un lapso de 5 a 7 días.

La instalación del contador de electricidad

Como ya lo hemos mencionado hace un rato, en un tiempo de entre 5 y 7 días, el técnico asignado por la distribuidora, irá hasta el domicilio para proceder a instalar el contador de luz, siempre y cuando se haya cumplido con el estar dentro de la zona de suministro eléctrico.

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¿Qué documentos se necesitan para contratar el servicio de luz?

Si se trata de una alta nueva o de un cambio, el cliente debe reunir ciertos documentos que luego presentará ante la comercializadora cuando vaya a hacer la solicitud, vía telefónica, virtual o presencial:

  • Datos del titular: entre los que destacan, nombres, apellidos, número de DNI, correo electrónico y número de teléfono.
  • Dirección de la vivienda o local: al cual se le hará el contrato de luz.
  • Número de IBAN de la cuenta bancaria: ya que a través de ese medio se realizarán los pagos de las facturas de electricidad.
  • La potencia eléctrica: para determinar cuál es la potencia eléctrica que necesitarás para el contrato, es aconsejable que busques la ayuda de un electricista para que haga un estudio y te indique la potencia exacta e ideal que necesitas. Este estudio lo hará en base a las dimensiones, aparatos eléctricos y electrodomésticos que puedas tener en el inmueble.
  • El Código Universal del Punto de Suministro (CUPS): será el técnico de la distribuidora quien se encargue de aportarte dicho código, luego de haber realizado la instalación de contador de luz. Si ya dispones desde hace tiempo de ese contador, entonces puedes buscar tu número en alguna factura antigua.
  • Boletín Eléctrico o Certificado de la Instalación Eléctrica: esto te lo pedirán si se trata de una alta nueva o del contrato de un alta de vivienda antigua.

¿Qué es el CUPS?

El Código Universal de Punto de Suministro (CUPS), es un número identificador del suministro de energía eléctrica de un inmueble en específico. Sería como una especie de DNI de la vivienda, el cual es permanente y pertenece únicamente a ese inmueble y no al titular del suministro.

¿Cómo saber cuál es mi CUPS?

  • En suministros que han tenido luz: en aquellas viviendas o locales que ya tienen un CUPS. Por lo que, la persona puede buscar este número en una facturación del inquilino anterior. Claramente verá que el CUPS está junto a los otros datos del suministro. En el caso de que no consigas la factura, puedes llamar a la distribuidora de la zona indicando la dirección exacta para que la compañía se encargue de indicar el CUPS.
  • Los suministros que no han tenido luz: sin importar que esa propiedad nunca haya tenido luz, cabe la posibilidad de que tenga un CUPS asignado, por ello, te aconsejamos que te contactes con la distribuidora para que te aporten dicha información. Dado el caso que te informen que no posee este número, tendrás que realizar la solicitud de apertura de un expediente acometida.
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Tipos de instalaciones eléctricas

Algo a lo que el cliente le da más importancia a la hora de contratar el servicio eléctrico para su inmueble es, sin duda, la potencia eléctrica que va a necesitar. Este indicador permite conectar varios electrodomésticos al mismo tiempo sin necesidad de que salte el Interruptor de Control de Potencia o lo que es lo mismo el ICP (plomos). La potencia que vaya a necesitar el inmueble va a variar dependiendo de la corriente que tenga la instalación, por lo que puede llegar a ser trifásica o monofásica, conociendo todos los detalles de esta información en el boletín eléctrico. En todo caso aquí te explicamos los tipos de instalaciones:

  • Monofásica: es la más común en los hogares y en locales pequeños. La potencia máxima para este tipo de instalación es de 14,49 kW, aunque hoy en día, la tensión más habitual es de 230 voltios, correspondiente a la antigua de 220 voltios.
  • Trifásica: es la más usada en grandes edificios comerciales y en casas antiguas, ubicando sus instalaciones en garajes, ascensores o en aires acondicionados antiguos. La tensión normal en ellos es de 400 voltios actualmente, cuando antes era de unos 380 voltios.

Sin duda alguna, no es una tarea tan difícil contrata la luz en España, simplemente debes tener la disposición y la información necesaria para llevarlo a cabo y, una vez que ya conozcas y reúnas todos los requisitos que se exigen, puedes proceder a dar los pasos que te indicamos para que puedas lograrlo.

¡Éxitos!