Para este miércoles, los líderes de la UE piensan reunirse con plan de mediación internacional en Bielorrusia. Son 27 los socios que están en contra de Alexandr Lukashenko, y quienes asistirán hoy miércoles a una cumbre que fue convocada por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en la que piensan cerrar filas, a favor de una transición democrática en Bielorrusia.
Esta decisión fue tomada, luego de que el pasado viernes los ministros de exteriores de la Unión Europea, lograran por unanimidad, imponer unas sanciones a los dirigentes bielorrusos que han sido considerados como responsables de haber manipulado las elecciones del 9 de agosto y, además, de los ataque violentos en contra de los manifestantes de las protestas por ese supuesto fraude electoral.
Desde la política exterior de la UE, parece que nadie está dispuesto a romper una lanza por Luokashenko. Bruselas piensa visualizar en dicha reunión un alto nivel de ruptura con quien consideran como el “último dictador de Europa”.
Esta cumbre se llevará a cabo, justamente 10 días después de que Lukashenko fue proclamado como ganador con el 80% de los votos que se celebraron el pasado 9 de agosto. Estos resultados, trajo como consecuencia, mucho descontento entre la población y salieron a las calles a protestar. También, huyó al exilio en Lituania el dirigente opositor Svetlana Tijanóvskaya. Igualmente, este porcentaje de votos es dudoso para la UE, por lo que, Michel asegura que “las elecciones en Bielorrusia no fueron libres ni justas”, en la carta de invitación dirigida a los líderes europeos que asistirán a la reunión mediante una viodeoconferencia, en la que, el presidente del Consejo Europeo piensa abogar por el conflicto en Bielorrusia con “un diálogo pacífico e inclusivo”.
Posible mediación
Existe la posibilidad de que se produzca una mediación internacional que pase por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa OSCE, quienes ya se han ofrecido para facilitar dicho diálogo para evitar más tensión en Bielorrusia. Dentro de la cumbre, también abordarán el tema de reclamo para que los bielorrusos puedan decidir limpiamente sobre su futuro sin necesidad de injerencias extranjeras.
Por otro lado, hay una leve tensión entre la UE y Rusia, pues, existiría la posibilidad de que la otra parte pueda tomar provecho de la inestabilidad de Luokashenko. Hay cierto grado de desconfianza en los comunicados de Kremlin acerca de las conversaciones con los líderes europeos, lo que hace deducir que se podría presentar un choque.
En el diálogo, también Putin “expresó su preocupación por los intentos de presionar al liderazgo bielorruso y desestabilizar la situación”. Además se habló sobre evitar confrontaciones, con la canciller alemana se trató el tema de que será inaceptable la crisis. Las conversaciones con el presidente de Francia fueron un poco más fluidas, mientras que con Macron, se abordó el tema de que no se aceptaría estar ejerciendo presión sobre Minsk, apostando “por una pronta resolución del problema”.
