En la provincia de Toledo, los agentes de la Policía Nacional lograron la detención del principal importador de drogas en España. El narco, es conocido en el país como el “Pablo Escobar” español de la heroína. Durante este operativo, desarticularon a la organización que al parecer dirigía en una operación, la cual ha dejado un saldo de nueve detenidos más.
Los agentes, intervinieron unos 55 kilos de esa sustancia, una de las mayores aprehensiones de esta droga en los últimos años en España.
La base de operaciones del detenido se encontraba en la provincia de Toledo, desde donde realizaba grandes importaciones de esa droga que provenía de los Países Bajos. Posteriormente, la distribuía en Madrid, Castilla y León, Castilla la Mancha y Extremadura, según lo que detalló la Policía Nacional.
Junto a él, la policía detuvo a seis hombres y tres mujeres que también eran integrantes de la organización delictiva. En las investigaciones y pesquisas, detectaron ocho registros en distintas viviendas de Madrid, Toledo y Cáceres, así como también, un concesionario de compraventa de vehículos y un taller mecánico, ambos ubicados en Cáceres. De las diez personas detenidas, ocho ya han ingresado en prisión.
Por otra parte, explicaron que el líder del grupo, tiene vínculos muy estrechos con una organización internacional de narcotráfico dirigido por un ciudadano turco al que conocen como “El Paralítico”.
Red de distribución
El pasado mes de marzo de 2021, fue que se iniciaron los procesos de investigación, al ser detectado por los agentes, que el “Pablo Escobar” español, se había puesto en con conocidos traficantes de heroína. Entre ellos, se encontraba uno de los líderes famosos de un clan, que habría tenido una importante participación en la distribución en la Cañada Real Galiana, en Madrid.
Luego de pasar unos cuantos meses de pesquisas, los agentes descubrieron que la organización criminal, contaba con la mayor parte de su infraestructura en la provincia de Toledo.
Poseían una gran cantidad de fincas y varias viviendas que estaban localizadas en esa misma provincia, más específicamente en zonas rurales, la cual utilizaban para poder esconderse mejor y para ocultar todos los cargamentos de droga y adulterarla, para luego distribuirla entre los distintos clanes y grupos criminales pertenecientes a Madrid, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura.
La policía, también descubrió a un colaborador que actuaba como caletero para la ocultación y custodia de las partidas de heroína en su vivienda en Toledo, además de otra persona en Madrid que se encargaba de funciones de correo para la recepción y entrega de la droga.
