El Gobierno Balear anunció la restricción de las reuniones sociales o familiares de más de 10 personas, bien sea en espacios públicos o privados, y el uso obligatorio de la mascarilla en los puestos de trabajo cerrados a partir de este viernes 28 de agosto para detener la expansión del virus; después de registrar este miércoles más de 900 casos positivos; según datos ofrecidos por la comunidad autónoma.

Asimismo, la presidenta balear, Francina Armengol, informó que se reducirán a la  mitad la capacidad total de personas en bares, restaurantes, teatros, actividades culturales y deportivas, bodas y mercados; bien sea al aire libre como en espacios cerrados. También, se cerrarán los parques y las playas en un horario de 21:00 a las 7:00 horas por las noches para evitar agrupaciones de personas tras el cierre del ocio nocturno. 

Estas medidas se añaden a otras que se encuentran ya vigentes, como la prohibición de fumar en espacios públicos, que se prolongará este fin de semana a toda situación; independientemente de que se cumpla la distancia interpersonal de más de dos metros. Igualmente, los prostíbulos deberán cerrar sus puertas, según la orden que se publicará en el boletín oficial de la comunidad de Beleares este viernes; y los centros de ocio nocturno se mantendrán cerrados durante 15 días más. “Tenemos que afrontar con rigor y responsabilidad esta segunda oleada y tomar las medidas adecuadas en los momentos adecuados”; señaló Armengol, quien además confirmó, el martes que el archipiélago enfrenta una segunda ola de la pandemia.

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Medidas para disminuir el contacto

La presidenta también insistió en que las nuevas limitaciones sociales se adoptan para combatir los contagios relacionados a las reuniones con familiares y amigos; que son el origen de la mayoría de los nuevos casos positivos. Se acogen en un momento decisivo “para poder empezar el curso escolar”; con una máxima seguridad. 

De igual manera, los funerales y velatorios quedan limitados a máximo 30 personas en el exterior, 15 en interiores y un total de 30 en los cortejos de entierros. Igualmente, se aplaza la restricción de la actividad 15 días más y el consumo de bebidas y alimentos estará prohibido en actividades culturales y deportivas en privado y en transportes públicos.

El Gobierno Balear también está valorando establecer restricciones de movilidad; aunque no ofreció mayores detalles. Según la presidenta Armengol, su régimen estaría competente jurídicamente para prohibir la movilidad interior en el ejercicio de sus capacidades; por lo que no piensa recurrir a la declaración del estado de alarma que según el criterio de Pedro Sánchez pueden necesitar las comunidades en cualquier momento.

De esta manera, Baleares se incorpora a Murcia, Cataluña, Madrid y Navarra; que esta semana anunciaron restricciones sociales tras el acelerado incremento de contagios del virus.