Antes de partir a China para reunirse con su homólogo, Xi Jinping, reiteró su apoyo al libre comercio. La pausa en los aranceles, aunque aún se desconocen sus detalles precisos, abre “una puerta a la negociación y el acuerdo entre países”
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha declarado que la pausa arancelaria de noventa días anunciada por el mandatario estadounidense, Donald Trump, representa “una puerta a la negociación y el acuerdo entre países”. Calificó los gravámenes planeados por el Gobierno de EE.UU. como “injustos e injustificados” y recalcó la importancia de fortalecer los vínculos comerciales con China, a pesar de las discrepancias expresadas por Estados Unidos.
Durante su segundo día de visita oficial en Vietnam, Sánchez ha abogado por un comercio equitativo y el multilateralismo, en respuesta a los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump. “El comercio no es una competición donde solo uno sale beneficiado. Todos pueden ganar”, ha declarado.
Antes de partir hacia China para un encuentro con su homólogo, Xi Jinping,Sánchez reiteró su apoyo al libre comercio durante su discurso en un foro empresarial entre España y Vietnam.
En marzo, el gobierno de Trump impuso tasas del 25% a las importaciones europeas de acero y aluminio, medidas a las que recientemente se añadieron los denominados “aranceles de reciprocidad”, cuya aplicación ha sido temporalmente suspendida por un período de noventa días.

Unos aranceles “injustos e injustificados”
El presidente español omitió en su discurso las declaraciones del secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, quien había cuestionado la postura de España de acercarse a China, llegando a afirmar que tal movimiento “sería como cortarse el cuello”.
Sin embargo, Sánchez sí ha aludido al paso atrás de Trump en la guerra comercial, al conceder una tregua de noventa días para implementar la mayoría de los aranceles planeados. No obstante, esta medida excluye expresamente a China, cuyos productos ya enfrentan tasas de hasta el 125%.
El mandatario español calificó los gravámenes planeados por EE.UU. como “injustos e injustificados”, destacando especialmente la “escalofriante” tasa del 46% impuesta a Vietnam. Subrayó que estas medidas desatan conflictos comerciales donde, lejos de haber vencedores, todas las partes resultan perjudicadas.
Por este motivo, ha valorado que la suspensión temporal de aranceles, aunque aún se desconocen sus detalles concretos, representa “una puerta a la negociación y el acuerdo entre países”.
“Si uno gana, el otro también puede ganar”
En consonancia con su postura habitual, Sánchez ha reafirmado su compromiso con “un mundo de puertas abiertas”, donde el intercambio comercial sirva como vínculo entre naciones. “El comercio no es una competición con ganadores y perdedores. Cuando una parte prospera, la otra también puede beneficiarse. Esta es nuestra convicción, que solo requiere de normas equitativas para hacerse realidad”, enfatizó el líder español.
El líder español ha subrayado que esta visión representa el camino estratégico de Europa, el cual no solo se mantendrá, sino que se reforzará mediante la incorporación de “nuevas alianzas” y un compromiso firme con la cooperación internacional. “Profundizaremos en este modelo con determinación, ampliando nuestra red de socios globales y fortaleciendo el sistema multilateral”, afirmó.
Respecto a las medidas adoptadas, Sánchez destacó que España ha respondido a la confrontación comercial con agilidad y equilibrio, en estrecha coordinación con sus aliados europeos. El gobierno ha implementado una estrategia integral que combina protección sectorial con impulso comercial, dirigida a salvaguardar tanto a los actores económicos como a la población en general. “Ninguna empresa española quedará desprotegida frente a estas medidas arancelarias”, aseguró con rotundidad.

El presidente Sánchez instó a generar estabilidad en el actual escenario geopolítico convulso, defendiendo el respeto mutuo como base para las relaciones internacionales. “Frente a problemas globales que trascienden fronteras, necesitamos unidad. Únicamente mediante la cooperación multilateral, la solidaridad y el compromiso compartido, recalcó, podremos superar estos desafíos que afectan a toda la humanidad”.
Previamente, el canciller José Manuel Albares, quien forma parte de la comitiva presidencial en Asia, había valorado positivamente la moratoria arancelaria de Trump durante un intercambio informal con corresponsales. Según el ministro de Exteriores, esta decisión facilita el espacio necesario para la negociación diplomática.
El mandatario español ha reafirmado la importancia de fortalecer los vínculos entre la UE y potencias emergentes como China, considerando la próxima visita oficial de Sánchez al país asiático como un gesto diplomático rutinario.
Durante su estancia en Vietnam, el presidente ha asegurado el apoyo activo de las compañías españolas para impulsar el crecimiento económico vietnamita, al tiempo que ha subrayado la necesidad de alcanzar un intercambio comercial más equilibrado entre ambas naciones.